VAV

El sistema VAV (volumen de aire variable) es el sistema más aconsejado para un uso intensivo y seguro de una vitrina de gases, con la variación de volumen hay un control de velocidad que ningún otro sistema garantiza, esto significa que el usuario, cualquiera que sea el ambiente, siempre estará seguro.

El sistema recurre a lecturas constantes de las velocidades, tan pronto como esta baja, el sensor envía la información al controlador central, que a su vez pasa la información al actuador que ajusta la apertura de la válvula para que la velocidad vuelva a los niveles pretendidos.

Además de los claros y evidentes beneficios en la seguridad de este sistema, los beneficios son también económicos. Una vez que las extracciones y volúmenes de aire están siempre adaptados a las necesidades y no hay consumos innecesarios, también el HVAC de la sala tendrá que ser un sistema con volumen de aire variable, de esta forma, tenemos una optimización de los consumos, nunca habiendo consumos innecesarios.

A pesar de ser un sistema que permite ahorrar en el día a día, es un sistema mucho más caro en su compra que el CAV, sin embargo, el ahorro en el uso acaba por compensar en mucho al usuario. En el caso de usar una vitrina de gases con sistema VAV también el HVAC de la sala tendrá que ser pensado como VAV, para que los parámetros de la sala sean cumplidos para su propia seguridad.

Como el nombre indica, el sistema VAV es un sistema que varía el volumen de aire extraído según la apertura de la ventana, así que pasamos a tener una velocidad facial estable, esto implica que la seguridad del usuario está garantizada con la ventana abierta o cerrada. El sistema VAV viene con un lector de velocidad que hace una lectura constante de los valores de extracción y comunica al sistema central que a su vez da información al actuador que abre o cierra un poco más el amortiguador, controlando así el volumen de extracción y la velocidad facial. Este es el sistema más aconsejado para un laboratorio, ya que garantiza siempre la seguridad del usuario y permite un mejor ahorro de gastos energéticos.

Como medida adicional de seguridad, cuando la apertura de la ventana excede los 500mm o cuando las condiciones no son ideales para el uso de la vitrina de gases, la luz interior pasa de un blanco puro a rojo, alertando así a los usuarios, de una manera bien visible, que la vitrina de gases no debe usarse en las condiciones en que se encuentra en ese momento.